El Valor del Trabajo
Existe diferencia crucial entre un inversionista que se beneficia de su inversión, y un prestamista que se beneficia de un préstamo. Di-s ordenó a Moisés que le dijera al pueblo judío: "No tomarás de él lucro ni usura" (Levítico 25:36).
En una inversión, el inversionista invierte en un emprendimiento financiero. El dinero invertido por el inversionista pertenece al inversionista, y está invertido para obtener beneficio de la inversión.
En un préstamo, el prestamista transfiere la propiedad del dinero al prestatario. El dinero pertenece al prestatario, aún cuando el prestatario esté obligado a reembolsar el dinero en el futuro. Cobrar intereses por un préstamo al prestatario, significa lucrar con el esfuerzo del prestatario sin haber participado en su esfuerzo.
El prestamista cobra intereses sobre el dinero prestado, basándose en el hecho de que el dinero le pertenecía. El cobro de intereses sobre un préstamo, se opone a la forma en que Di-s quiere que el mundo funcione.
Si te dicen: "He trabajado sin resultados", no le creas. Si te dicen: “No me he esforzado, y aún así he visto resultados”, tampoco le creas. Pero si te dicen: “He trabajado duro y he visto resultados”, créele.
Jorge Alejandro DelaVega Lozano.
j.delavegal@gmail.com