Ursalim

“Ursalim” es la primera referencia sobre Jerusalem confirmada en las “Cartas de Amarna” escritas en tablillas de arcilla con temas diplomáticos en forma de correspondencia entre la administración egipcia y sus representantes en Canaán, región semítica en el antiguo oriente 2000 a.C., y Amurru, reino Amorita establecido 2000 a.C. en lo que hoy es el noroeste de Siria y norte de Líbano. Las cartas fueron encontradas en Amarna, Alto Egipto, antigua capital egipcia de Akhetaten (el-Amarna), fundada por el faraón Akhenaton. Las “Cartas de Amarna” son inusuales en la egiptología, porque están elaboradas en escritura cuneiforme acadia de la antigua Mesopotamia, en lugar de la escritura del antiguo Egipto. Son más de trescientas tablillas de arcilla cuya información escrita abarca un período de al menos treinta años. EA 161, carta de Aziru, líder de Amurru (hoy Líbano) exponiendo su caso al faraón en una de las cartas de Amarna en escritura cuneiforme en una tableta de arcilla.

Además de “Urusalim”, Jerusalem tuvo los nombres siguientes: “Jebus” por los jebuseos, tribu cananea que habitaba la región de Jerusalem; “Aelia Capitolina”, colonia romana construida por el emperador Adriano; “al-Quds” nombre árabe que significa la santa; “Yerushalayim” nombre israelita. Hace 4700 años la población de una ciudad llamada "Rushalimum" se mencionó en escrituras egipcias como enemiga del faraón. Rushalimum significa "fundado o establecido por shalem" o “ciudad de shalim”, deidad cananea conocida a partir de mitos sirios sobre el final del día, el atardecer. Al parecer la ciudad Rushalimum estuvo dominada por una cultura de la “Mitología Ugarítica”, similar a la religión cananea de la época. La palabra "Ursalim" está compuesta por dos palabras en lenguaje semítico noroccidental prehistórico que más tarde daría origen al hebreo, arameo, árabe y etíope: el verbo “Yaru” que significa "fundado, establecido" y el nombre “Shalim”, dios cananeo del atardecer. El lenguaje semítico noroccidental comprende lenguas de Levante del semítico común en la Edad del Bronce Antiguo. Urusalim se muestra primero en nombres propios como Amorite en la Edad del Bronce Medio. Los textos coherentes más antiguos están en “Ugarítico” y datan de la Edad del Bronce Final que en el momento del colapso de la Edad del Bronce quedaron unidos con el antiguo arameo en la Edad del Hierro por las lenguas cananeas, fenicio y hebreo. Entonces "Ursalim" y “Yerushayalim” significan "ciudad de Shalim" o "establecido por Shalim", lo que indica que Shalim era la deidad tutelar original de esa ciudad. Algunos afirman que la raíz s-l-m en el nombre Jerusalem se refiere a "paz", “shalom” en hebreo, no a un dios pagano, pero esto es poco probable porque si se tratara de la palabra hebrea “shalom” que significa “paz”, “shalāmu”, se habría producido el nombre de Yerushalom.

En la Biblia, "Jerusalem" es la "Ciudad de Jebus" (Jueces 19:10) porque los jebuseos vivían allí antes que el rey David comprara territorio a Araunah, rey de los jebuseos. Araunah se menciona en el Segundo Libro de Samuel como dueño de la cima del Monte Moriah que David compró y utilizó para construir altar a Dios. En el primer libro de las Crónicas se indica el nombre de Araunah como Ornan. Araunah fue un jebuseo del grupo étnico de los Hititas. En el idioma hitita, “araunah” significa el señor, no es un nombre personal, sino un título y en 2 Samuel 24:23, Araunah es un rey.

Jerusalem se conoció también como “Aelia Capitolina”, nombre que los romanos le dieron a la ciudad, después de triunfar sobre la rebelión judía dirigida por Bar Kochba en el siglo II d.C. Este nombre deriva de “Elio” (Aelia), nombre gentil del emperador Adriano, y de "Capitolina", en referencia al dios romano “Júpiter Capitolino” al cual dedicaron la ciudad de Jerusalem. El nombre “Aelia Capitolina” dejó de utilizarse después de la conquista musulmana de Jerusalem en el año 632 d.C.

La palabra "Jerusalem" con “J” es moderna. En tiempos bíblicos, el nombre semítico noroccidental "Ursalim" se convirtió en "Yerushalem". Luego “Ierousalḗm” fue el nombre de Jerusalem en la traducción al griego antiguo koiné de la “Biblia Septuaginta” en el siglo II a.C., mientras que en hebreo cambió de “Yerushalem” a “Yerushalaim” que era un final común en los nombres de lugares israelitas antiguos después de 500 d.C. Mientras tanto, en Europa, el nombre griego “Ierousalḗm” se convirtió al latín como “Hierosolyma” que luego se transformó “Hierusalem” que a su vez se convirtió al francés antiguo en “Ierusalem”, pero como el francés se formó a partir del latín, las palabras que comienzan con la letra "i" comenzaron a pronunciarse con una “g” suave como en la palabra gimnasio antes del año 500 d.C. La Conquista normanda en 1066 trajo esta pronunciación “g” a Inglaterra, en palabras que venían del francés y del latín que resultó en un uso dual de la letra “i”. En palabras de origen germánico como isla, la letra “i” se pronunció como un “yo” largo, mientras que en palabras del latín y francés, se pronunció como “j’ aún cuando estos idiomas no tenían todavía la letra “j”. Jerusalem se pronunció "Jerusalem" a partir del siglo XII, pero se escribió "Ierusalén". La letra “j” se inventó en el siglo XVII y Jerusalem comenzó a escribirse y a pronunciarse en su forma moderna.

La diferencia entre "Yerushalaim" de los hebreos y "Jerusalem" de los ingleses es pequeña en comparación con el nombre árabe de Jerusalem “Al-Quds” que significa “La Santa” que fue utilizado cuando los ejércitos musulmanes conquistaron Jerusalem desde el Imperio bizantino en 638 d.C y, en versión abreviada del antiguo nombre romano “Aelia Capitolina”, lo llamaron "Iliya" . Otro nombre de Jerusalem que se utilizó después de la conquista musulmana fue “Bayt al-Maqdis”, traducción del nombre hebreo del Templo de Jerusalem - Beit HaMikdash (Literalmente "Casa Santa"), pero el nombre Bayt al-Maqdis es bastante largo y engorroso por lo que a partir del siglo IX los musulmanes nombraron a la ciudad de Jerusalem “Al-Quds” ("La Santa") y este nombre desplazó a los antiguos nombres árabes de la ciudad de Jerusalem. Hoy todavía los musulmanes llaman “Al-Quds” a la ciudad de Jerusalem.

Compilación y traducción: 
Jorge Alejandro DelaVega Lozano

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